ICL: Mis pacientes merecen lo mejor para sus ojos
¿Para qué tipo de pacientes están indicadas las lentes EVO ICL?
Durante años hemos asistido al “boom” del láser, pero lo cierto es que hoy día muchos oftalmólogos consideremos las lentes ICL como la primera elección en muchos pacientes, incluso en graduaciones medias y bajas, pues corrigen cualquier defecto refractivo y cualquier graduación, y aportan numerosas ventajas sobre la cirugía láser.
En el pasado, las lentes ICl quedaban reservadas para pacientes en los que el láser no estaba indicado en cirugía refractiva, por tener córneas especiales (delgadas, irregulares, muy planas o muy curvas) y altos defectos refractivos. Pero si antes los límites de corrección láser eran 10 o 12 dioptrías, posteriormente se demostró que ICL es el procedimiento de elección a partir de 6 dioptrías.
Basándonos en que la ICL es un procedimiento reversible, ICl ha ampliado sus indicaciones. En pacientes jóvenes, a partir de los 21 años, por la posibilidad de cambios refractivos en el futuro. Y en pacientes de más de 40 años, ya empezando la presbicia, que quieren quitar sus gafas de lejos, ya que el implante de una lente ICL es una cirugía menos agresiva que sustituir el cristalino, explicándoles, por supuesto, lo que esta cirugía les va a proporcionar. Yo siempre les digo, quedarás como cualquiera de tus amigos de tu edad que nunca tuvieron gafas y empiezan ahora a usarlas para cerca, y en unos años hablaremos de corregir la presbicia. También estamos implantando ICL en algunos casos de pacientes con queratocono, tras cirugía de anillos y crosslinking
Las lentes ICL son desconocidas para muchos pacientes aún llevando 22 años en el mercado, ¿cómo le explica al paciente esta técnica y sus ventajas?
Durante muchos años la cirugía láser ha sido el procedimiento más habitual, ayudado porque la publicidad da a entender que con el láser no se “toca” el ojo, cuando lo cierto, es que el láser actúa eliminando tejido corneal, con lo cual adelgaza la córnea, cambia su curvatura y aumenta las aberraciones corneales.
Al paciente le explicamos que con la lente ICl no tenemos que retirar ni eliminar ningún tejido del ojo, y que es una técnica tan sencilla como el láser, simplemente tenemos que introducir en el ojo una lente flexible, que la plegamos para poder implantarla por una mínima incisión de 3 mm, que no requiere ningún punto de sutura.
¿Cuánto tiempo llevan en el mercado?
Unos veinte años . Durante este tiempo hemos asistido a una serie de mejoras en el diseño de la lente. En este período se han implantado un millón de lentes en todo el mundo con resultados muy satisfactorios. Su eficacia y seguridad cada vez convence más a un número creciente de oftalmólogos y pacientes.
¿Cuánto tiempo duran?
Son lentes de material Colámero, que es biocompatible y que no precisa mantenimiento ,de modo que perduran toda la vida. Están preparadas para quedarse indefinidamente en el ojo . Cuando por alguna circunstancia se tienen que extraer del ojo, aunque hayan pasado muchos años, sorprendentemente están como el primer día sin ningún cambio por el paso del tiempo.
¿Qué beneficios tiene frente a otros procedimientos que también operan la miopía , hipermetropía y astigmatismo?
Entre las numerosas ventajas, seguridad, predictibilidad de resultados y calidad visual, yo destacaría la de ser un procedimiento reversible, ya que se pueden extraer y quedará el ojo en su estado inicial. Cuando se opera un ojo con lente ICL no se elimina ningún tejido ocular, como lo hace la cirugía láser, por lo que no interfiere para nada con cualquier cirugía ocular que se pueda necesitar en el futuro. Lo que hacemos hoy no es para siempre y cuando el paciente precise la cirugía de cristalino, es preferible que su córnea sea virgen.
Otras ventajas son el aportar mayor calidad visual, con mejor contraste de los colores, excelente visión nocturna y mayor seguridad, es decir menor riesgo, ante posibles traumatismos futuros.
Permiten realizar una vida activa sin límites. En Estados Unidos la cirugía con lente intraocular ICl está permitida en profesionales de alto riesgo (soldados, pilotos, bomberos, etc) y no lo está la cirugía láser, precisamente porque un ojo operado con lente ICL es mucho más seguro. Los deportistas también eligen este procedimiento por su mayor seguridad. Y si este procedimiento es el mejor para los pacientes de élite, también lo será para todo el mundo. Además no causan síndrome de ojo seco, que es una molestia de la que se quejan con frecuencia los pacientes operados con láser, sobre todo con la técnica lásik.
Ud. siendo cirujano Oftalmólogo experto en este tipo de cirugía, ¿por qué elige lentes ICL para sus pacientes?
Como cirujano experto en cirugía refractiva utilizo ambos procedimientos, cirugía láser y Lente intraocular ICl. Sigo realizando cirugía láser relex smile, prk, y femto-lasik. Cada técnica tiene sus indicaciones y hay que personalizar el tratamiento para cada paciente. Si hablamos de dioptrías, recomiendo como primera opción la cirugía láser como son los en pacientes con muy poca graduación, y la lente ICL a partir de las 6 dioptrías. Pero en graduaciones medias y bajas, cada vez más los cirujanos expertos en cirugía refractiva aconsejamos como primera opción las lentes ICL, porque como les digo a mis pacientes “se merecen lo mejor para sus ojos”.
¿Qué puede esperar un paciente de esta cirugía?
Una rápida recuperación y excelente calidad visual. Los pacientes ven como siempre han querido ver, con nitidez, claridad, y en muchas ocasiones ganan una o dos líneas de visión, respecto a la que tenían con sus gafas o lentes de contacto.
¿En qué les cambia la vida a sus pacientes ?
La visión es excelente casi de forma inmediata. Los pacientes salen de la clínica el mismo día de la intervención viendo bien sin gafas o lentes de contacto y al día siguiente pueden acudir a su trabajo habitual. Cuando los revisamos, el día después de la intervención están muy satisfechos, mucho mejor de lo que esperaban, y cuando los vuelves a ver al cabo de un tiempo te dicen que su vida ha cambiado, han ganado en libertad y comodidad y se han olvidado de sus gafas y lentillas. La mayoría manifiestan que es una de las mejores decisiones de su vida y se arrepienten de no haberlo hecho antes.